El costo que representan las maneras obsoletas de trabajar para su negocio

Las empre­sas de la economía dig­i­tal de hoy en día tienen más pre­sión que nun­ca para hac­er más con menos. Se espera que aumenten la pro­duc­tivi­dad sin pon­er en ries­go la cal­i­dad y que, al mis­mo tiem­po, man­ten­gan con­tentos a emplea­d­os y clientes. Sin embar­go, nues­tra inves­ti­gación de la Teoría del caos mues­tra que los ger­entes se esfuerzan por tra­ba­jar con más inteligen­cia, y los nego­cios pagan un pre­cio muy alto por ello.

Aunque los emplea­d­os tienen acce­so a tec­nologías dis­eñadas para facil­i­tar su conex­ión e incre­men­tar su pro­duc­tivi­dad, uno de cada cin­co proyec­tos se retrasa y un 14 % sobrepasan el pre­supuesto. Y es más, la mitad de los ger­entes están acep­tan­do tar­eas fuera de sus respon­s­abil­i­dades prin­ci­pales, lo que les deja menos tiem­po para ase­gu­rarse de que su equipo esté tra­ba­jan­do en con­jun­to de man­era efi­caz, lo que aumen­ta aún más el ries­go de no cumplir las fechas de entre­ga y salirse del pre­supuesto. domain name gen­er­a­tor En últi­ma instan­cia, las man­eras ine­fi­cientes de tra­ba­jar les cues­tan a los ger­entes de proyec­tos —y a las empre­sas— casi tres horas por sem­ana, lo que equiv­ale a más de 20 días lab­o­rales al año.

Para pon­erse al día, los ger­entes tra­ba­jan en sus días libres. En con­se­cuen­cia, pade­cen estrés rela­ciona­do con el tra­ba­jo que, en el peor de los casos, puede hac­er que se inca­paciten por motivos médi­cos durante sem­anas o inclu­so meses, lo que rep­re­sen­ta más ine­fi­cien­cia y retra­sos para la empresa.

Tenien­do todo esto en cuen­ta, ¿qué pueden hac­er las empre­sas para elim­i­nar el caos y mejo­rar sus resultados?

La clave es usar las tec­nologías más recientes para impul­sar el com­pro­miso de los emplea­d­os y preparar el camino para aplicar man­eras más inteligentes de tra­ba­jar. Las empre­sas deben elim­i­nar todo pro­ce­so inter­no com­ple­jo que mal­gaste tiem­po fac­turable —como silos de comu­ni­cación y la depen­den­cia exce­si­va del correo elec­tróni­co— y aumen­tar la trans­paren­cia. Esto les per­mi­tirá ser más ágiles y competitivos.

Aumen­tar la trans­paren­cia dará más capaci­dad a los nego­cios para evi­tar gas­tos innece­sar­ios al iden­ti­ficar inmedi­ata­mente las áreas que mal­gas­tan recur­sos y los posi­bles fal­los antes de que ten­gan un impacto en los clientes.

Al pro­por­cionar a sus equipos de tra­ba­jo dis­tribui­dos y siem­pre conec­ta­dos las her­ramien­tas ade­cuadas, las empre­sas pueden ter­mi­nar las tar­eas a tiem­po y den­tro del pre­supuesto, alcan­zar sus obje­tivos y mejo­rar sus ingresos.